XXX, Exija sexo excelente

Un colega ecuatoriano me contó hace unos años que en su país una congresista presentó un proyecto para que la Constitución garantice el derecho de las damas al placer sexual. La autora justifica semejante iniciativa en la necesidad de modificar una cultura que considera a la mujer nada más que como alguien obligado a satisfacer al hombre y a criar hijos. No me dijo qué organismo estatal se encargará de asegurar que las beneficiarias efectivamente gocen de ese derecho (la precisión en el uso del verbo se debe a la casualidad). Me animo a pronosticar una serie de fenómenos interesantes. Como se sabe, cada vez que existe el derecho de alguien a recibir algo es porque otro está obligado a dárselo. Y una cultura no se cambia de un día para el otro. De modo que los tribunales recibirán una avalancha de demandas contra maridos, novios y amigos incumplidores. Deberán acondicionarse las salas de audiencia para que los demandados puedan probar cómodamente el cumplimiento de su obligación, ac...