Diez propósitos para la cuarentena


25 de marzo de 2020. 
Querido diario: 
Encontré un libro norteamericano de autoayuda de los años noventa (The 45-page hapiness), que recomienda a cada rato hacer listas. Estos son mis diez propósitos para todo lo que dure este aislamiento. 1) darle una última oportunidad a Tlön, Uqbar, Orbis Tertius, a ver si esta vez lo entiendo o me termino de convencer de que fue otra broma de Borges; 2) valorar la desaparición de las visitas; 3) superar el problemita neurológico que me impide hacer sobre un teclado simultáneamente con las dos manos lo que hago bien por separado con cada una, no en ocasión de Adiós Nonino sino de, por ejemplo, El puente de Avignon; 4) celebrar que haya calamidades que se propagan incluso con mayor velocidad que el peronismo; 5) leer La Divina Comedia, que no creo que me interese gran cosa; 6) no pagar impuesto alguno al gobierno argentino; 7) preparar bien la venganza contra el carísimo cretino que aseguró haber reparado el lavaplatos; 8) matarme de risa de los que necesitan fingir que están tapados de videoconferencias de trabajo; 9) por las dudas pase al lado menos atractivo del césped, revisar una vez más el video que contiene el discurso que pasarán en mi funeral, que será vía Zoom aunque finalice el aislamiento, para no andar molestando a la gente post mortem; 10) recordar que todos esos privilegios no se me tienen que hacer vicio, y que esto de vivir como en un parque temático es transitorio.

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